Los controladores descontrolados

¡Por fin el Gobierno hace algo mas que subir inpuestos y bajar las prestaciones sociales! El tema de los controladores es algo que se esperaba, suelen hacerlo así cada puente largo, cada primero de Agosto , Semana Santa, Navidad y otras fiestas de guardar; son el colectivo, junto con los pilotos, que creen tener unos derechos especiales, muy distintos del resto de los humildes mortales. Pero por fin ha sucedido, el mango de la sartén se ha recalentado, les ha dejado la mano hecho unos zorros y en muy baja forma para mantener el pulso con el Gobierno. Por si esto fuera poco, se han ganado el rechazo de la sociedad y los abucheos de un pueblo harto de sus machadas de señoritos bien a los que importa una mierda fastidiar las vacaciones a familias enteras en aras de un aumento de sus ya abultados derechos y privilegios que, por otra parte, no tiene por que estar a años luz de los derechos y privilegios de otros colectivos como, pongo por caso, los profesionales de la medicina o la minería. Esta huelga encubierta que secuestra a miles de usuarios en los aeropuerto ha sido, ademas de cobarde, la gota que colma el vaso. Y es misión del Gobierno cerrar el grifo para evitar una gota mas y, desde luego, no darles un vaso mas grande. Quizás sea el momento de que descubran que el chantaje a costa de los usuarios inocentes y la prepotencia tienen un coste. Tan alto como el del tabaco.

Traición

El gobierno (la minúscula es a propósito) que ¿encabeza? Zapatero El Insigne no para de dar puñaladas traperas a la clase trabajadora: Esta crisis, la misma que él negaba, ha conseguido hacer desaparecer la clase media, ahora solo hay pobres y muy ricos; en pocos años hemos retrocedido hasta principios del siglo XX. Los nuevos aristócratas son la gran Banca y aquellos que poseen el dinero, la mayoría de las veces conseguido sin demasiados escrúpulos; ellos nos han metido en esta crisis y, sin embargo, el Insigne, vocero del gran capital, ha decidido que lo paguemos los que menos podemos hacerlo. Quitan la ayuda familiar a los desempleados, harán trizas nuestras pensiones y el futuro de nuestros hijos y nietos de la misma manera que han destrozado nuestro presente y eliminado nuestro futuro inmediato de pensionistas, ese futuro que nos habíamos ido labrando, bien que mal, a lo largo de tantos años cotizando a una Seguridad Social y a una Hacienda Pública que, a la postre, nos deja tirados mientras ellos se aseguran suculentas pensiones dignas de capos mafiosos. Nos llevan a la pobreza y la miseria mientras ellos nos miran desde sus despachos y altos edificios, esos edificios que han convertido en sus Palacios de Invierno. ¿Palacio de Invierno? Esto me recuerda algo. No estaría de mas que ellos también recordaran la historia. Y que recuerden también que hay algo que nadie perdona: Ver pasar hambre a sus hijos.

Lamentablemente, para recordar hay que tener cerebro.

Final y créditos